La salud es el resultado de dos factores: la genética y el medio ambiente. Las enfermedades tienen un origen genético en un 49% de los casos y la otra mitad es atribuible al medio ambiente.
En 1990, Barker presenta la teoría conocida como “Programación embrionaria y fetal”, asegura que los efectos metabólicos de carencias nutricionales durante el embarazo programan la presentación de enfermedades como la diabetes, hipertensión, obesidad, ateroesclerosis, etc. durante la vida.
Aún más, aparentemente la “Programación embrionaria y fetal” inicia antes de la concepción. Por lo tanto, el periodo preconcepcional es una ventana de oportunidad para abandonar hábitos higiénico-dietéticos malos y mejorar las condiciones de salud para tener hijos sanos.
En la practica los cuidados preconcepcionales consisten en recomendar un mejor estilo de vida, tratar y controlar en caso de ser necesario las enfermedades que presente la futura mama. Así mismo, también es importante tomar ácido fólico, evitar consumir alcohol, dejar de fumar y de usar drogas ilícitas.
Una visión más amplia consiste en evitar la exposición a metales pesados, insecticidas y sustancias químicas potencialmente peligrosas, que puedan favorecer la presentación de diabetes, obesidad y enfermedades coronarias.
Los metales pesados con efectos en el embarazo son el plomo, mercurio y cadmio.
El plomo se encuentra en:
· Remedios para la salud naturistas, principalmente los fabricados en India y China.
· En alimentos que utilizan pulpa de tamarindo o chile.
· Cosméticos para delinear los ojos que contienen kohl, Kajal, alkahal, surma, tiro, tozali y kwalli (productos utilizados en Asia y África).
· Ollas, tazas y platos de barro.
· La pintura de las partes metálicas de joyas, juguetes, amuletos y dijes,
· Así como, en cremas y jabones para aclarar la piel, principalmente las fabricadas en República Dominicana y China.
La recomendación es dejar de usarlos y si estuvo expuesta por un periodo prolongado realizarse una prueba de niveles de plomo en sangre.
En lo que respecta al mercurio la principal fuente son los pescados, hay que evitar consumir durante el embarazo y la lactancia: la macarela rey o caballa, tiburón, pez espada, marlín, atún en lonja, mero, así como el lofalátilo o azulejo. Se debe preferir comer salmón, abadejo, bagre y el atún enlatado.
El cadmio se adquiere por la exposición a la contaminación generada por las fábricas, principalmente las mineras y las industrias de la fundición. La fuente de contaminación más frecuente es el humo del tabaco y se presenta en los fumadores activos y pasivos, por lo tanto, hay que evitar la exposición a estos contaminantes.
También el cadmio se encuentra en las vísceras del ganado vacuno y porcino, el hígado, lengua, corazón, riñones, sesos y tripas de los animales, la recomendación es evitar su consumo antes y durante el embarazo, así como en la lactancia.
Algunas sustancias químicas tienen una estructura semejante a las hormonas, pueden alterar el equilibrio hormonal, el desarrollo embrionario y provocar efectos adversos sobre la salud. Entre estos compuestos se encuentran el Bisfenol A y los Ftalatos que son conocidos como disruptores endocrinos.
El efecto de estos compuestos depende de la edad en la cual ocurre la exposición. En el periodo preconcepcional, durante el embarazo y los primeros años de vida las consecuencias sobre la salud del individuo pueden ser graves.
El Bisfenol A es un producto químico industrial que se utiliza para fabricar las botellas y contenedores de plástico que almacenan alimentos y bebidas. Los productos marcados con código de reciclaje 3 o 7, así como el recubrimiento de las latas, pueden estar hechos con Bisfenol A. Por otro lado, los ftalatos son compuestos químicos utilizados como plastificadores, cuya función principal es dar flexibilidad y elasticidad al plástico.
Para evitar la contaminación de los alimentos con Bisfenol A y Ftalatos se aconseja que no se calienten los alimentos en recipientes de plástico en hornos de microondas y tampoco se laven las botellas y contenedores de plástico en máquinas lavaplatos. También es más seguro utilizar recipientes de vidrio, porcelana o acero inoxidable para comer o tomar líquidos.
Recuerde, las botellas y contenedores de plástico marcados con código de reciclaje 3 o 7 se deben de evitar durante el embarazo.
Esperamos que esta información sea de utilidad y quedamos atentos a sus comentarios.
Referencias:
Barker DJ. The fetal and infant origins of adult desease. BJM 1990;301:1111.
Simon C. Preconceptional care:do we have tu care? Fertil Steril. 2019;112:611.
Segal T. Giudice L. Before the beginning: enviromental exposures and reproductive and obstetrical outcomes. Fertil Steril. 2019;112:613.
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